viernes, 20 de abril de 2007

Si la amistad fuera inyectable

El martes quedé con un buen amigo, uno de los pocos de los que realmente puedo decir eso, y pasamos la mañana y el mediodía juntos. !No hay mejor inyección vital que esa! Tras mucho tiempo sin vernos, descubrí que el entendimiento entre nosotros es casi mejor ahora de lo que nunca había sido.
Debo dar gracias a la vida por poner en mi camino a una persona como él, que llegó a mi vida hace casi 12 años para despertarme de la letargia en la que el mundo me hundía y que hoy, tras períodos de complicidades y también de alejamientos inexplicables, sigue ahí, ofreciéndome una sabiduría y una confianza de la que nunca me siento merecedora... espero que la vida no vuelva a separarnos algún día...
Quisiera decir a aquellos que puedan leer esto que para mí un café con un gran amigo puede ser fuente de más felicidad que tener un piso más grande, un coche más nuevo o el último modelo de móvil, y que todo debería ser así de sencillo...todos deberíamos saber apreciar el tiempo y los pensamientos que nos regalan los demás a veces. Nada tiene más valor ni nos hace crecer tanto como viajar al fondo de las personas a las que queremos y aprender de ellas.
Gràcies, Toni!

sábado, 14 de abril de 2007

Humedad relativa

Las caricias que nunca fueron la visitaban en sueños, y podía sentir sin vergüenza ni culpa aquella mirada penetrando en su alma. El contacto húmedo de unos labios que jamás había probado la hacía estremecer. Ella los buscaba con los suyos, pero el beso nunca parecía real...
A veces, el sueño se prolongaba hasta que él estaba dentro suyo, loco por poseerla aunque fuera por un instante...entonces ella no quería que se acabara. Lo asía con fuerza con las piernas y sentía que todo tenía sentido al ver esos ojos buscando los suyos, clavándosele con la misma ansia que despierta los rehuía.
Al despertar, ella no podía evitar sentir que traicionaba a su amor, a ese amor real que también la buscaba bajo las sábanas y en cuya mirada ella se sentía arropada y tranquila al fin.
Anónimo

Supongo que todos soñamos caricias y palabras que nunca fueron y que nunca serán... los que leéis esto, ¿también?

Somnis de la Nura / Sueños de Nura


Avui tenies son però no podies adormir-te perquè estaves nerviosa per culpa de les vacunes que et van posar l'altre dia. No paraves de plorar amb aquell plor teu de gatet... Per a calmar-te, t'he deixat agafar-me un dit i he començat a parlar-te en veu baixa, cada cop més baixa, dient-te que ets la nena més preciosa del món, que ets més dolça que un pastís de xocolata, que t'estimaré sempre...tot el que m'inspiraven aquests ulls teus que voldria que mai haguessin de veure les coses lletjes de la vida. Em miraves embadalida i, en un silenci hipnòtic, has anat tancant els ulls mentre anaves afluixant la pressió de la teva maneta al voltant del meu dit. En aquell moment, m'he sentit en un estat de pau i felicitat absolutes. Gràcies per aquest regal, nineta.

Hoy tenías sueño pero no podías dormirte porque estabas nerviosa por culpa de las vacunas que te pusieron el otro día. No parabas de llorar con aquell llanto tuyo de gatito... Para calmarte, he dejado que me cogieras un dedo i he empezado a hablarte en voz baja, cada vez más baja, diciéndote que eres la niña más preciosa del mundo, que eres más dulce que un pastel de chocolate, que te querré siempre...todo lo que me inspiraban esos ojos tuyos que querría que nunca tuvieran que ver las cosas feas de la vida. Me mirabas embobada y, en un silencio hipnótico, has ido cerrando los ojos mientras ibas aflojando la presión de tu manita alrededor de mi dedo. En ese momento, me he sentido en un estado de paz y felicidad absolutas. Gracias por este regalo, muñequita.

Infancia rota

Este fragmento de La Sombra del Viento, de Carlos Ruiz Zafón, en el que el protagonista recuerda su infancia tras la muerte de su madre, me hizo recordar tiempos oscuros de ausencias que me robaron para siempre esa ingenua seguridad de la infancia...

De niño aprendí a conciliar el sueño mientras le explicaba a mi madre en la penumbra de mi habitación las incidencias de la jornada, mis andanzas en el colegio, lo que había aprendido aquel día...No podía oír su voz o sentir su tacto, pero su luz y su calor ardían en cada rincón de aquella casa y yo, con la fe de los que todavía pueden contar sus años con los dedos de las manos, creía que si cerraba los ojos y le hablaba, ella podría oírme desde donde estuviese. A veces, mi padre me escuchaba desde el comedor y lloraba a escondidas.

Debo reconocer que aún ahora siento la luz y el calor de mi padre en muchas ocasiones, aunque duele como el primer día no poder sentir su abrazo protector... un beso para él, donde quiera que esté!

jueves, 12 de abril de 2007

Por qué estoy aquí?

Pero, ¿cuál es tu propósito definitivo?, dirás tú. Este propósito se vuelve más definidio, se dibujará lenta y seguramente como el croquis se hace esbozo y el esbozo cuadro a medida que se trabaja más seriamente, que se profundiza más la idea, en principio vaga, el primer pensamiento fugitivo y pasajero, a menos que se haga fijo.
Cartas a Théo, Vincent Van Gogh.

Ésa es la idea...iré dibujando este blog ya que no dibujo desde hace tiempo e intentaré acercarme humildemente a aquellos que me conocéis y querais conocerme mejor...pero también, supongo, a algunas mentes pensantes que estarán cerca o lejos en este mundo y que todavía no conozco. Si hay un viaje importante a realizar en esta vida es el viaje al interior del ser humano. Gracias por adelantado por dedicarme un poco de tiempo de vuestras vidas!